Argentina: Científicos de la UNLP
advierten que
el glifosato está en todos lados.
5
de junio de 2018
Investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional
de La Plata advierten que los residuos de este peligroso herbicida con
potencial carcinogénico están presenten, en diferentes concentraciones, en la
lluvia que cae en el centro de nuestra ciudad, en el algodón, gasas, peces, en
las lagunas bonaerenses, en distintos alimentos que consumimos, en todo nuestro
sistema ambiental.
El
glifosato es un herbicida de amplio espectro, desarrollado para la eliminación
de hierbas y de arbustos. Tiene efecto por contacto con las hojas y algunos
estudios proponen su traslocación desde las raíces. El uso de este herbicida es
objeto de controversia desde el punto de vista toxicológico y ambiental.
Los argentinos tenemos una exposición continua y sostenida a este
compuesto y a otros tantos plaguicidas. Existen relevamientos en niños en zonas
fumigadas donde se ha demostrado el daño genético respecto a un grupo control,
el que ha sido asociado con la exposición a plaguicidas. Particularmente, el
glifosato ha sido asociado a Linfoma no Hodgkin, en aplicadores en Estados
Unidos.
Damián Marino, científico del Centro de Investigaciones del
Medioambiente (CIM), un organismo de doble dependencia UNLP-Conicet, remarcó:
"el glifosato es una molécula muy pequeña que tiene la función de ser un
herbicida generalista porque no discrimina, sino que mata todo aquello que sea
verde a excepción de un organismo genéticamente modificado como la soja, el
maíz o el algodón. Con el tiempo, algunas especies después de 20 años del uso
de este compuesto comenzaron a hacerse resistentes, motivo por el cual debió
aumentarse la cantidad del químico por hectárea".
Según Marino, "en los últimos 10 años entraron más de 1000
millones de litros de glifosato. Este número pone a la Argentina en el primer
puesto a nivel mundial en la cantidad de uso de plaguicidas por habitante por
año (10 litros
de plaguicidas por habitante por año)".
Y detalló: "en las distintas muestras ambientales que se
toman en nuestro país, se puede ver que el glifosato ocupa entre el 80 o 90 %
de la carga másica total de plaguicidas de la muestra".
"Cuando arrancó hace 20 años el modelo de agroproducción
extensivo en base a transgénico, se usaban en el país 3 litros de glifosato por
hectárea por año. Hoy el promedio es de 15 litros de glifosato
por hectárea por año, y en el caso del algodón hasta 40 litros por hectárea
por año. Las dosis han ido aumentando porque ya no hacen el mismo efecto que
hacían al principio y esto se debe a la resistencia que van generando las
distintas especies", explicó el investigador.
Para Marino "cuando hablamos del modelo productivo tenemos
que entender que se trata de un modelo de base química, el glifosato está
destruyendo los distintos ecosistemas, produciendo una pérdida de la
biodiversidad, ya que por ejemplo al eliminar determinada planta también se
elimina la especie animal que depositaba sus huevos en esa planta,
consecuentemente a la especie que se alimentaba de ese bicho, lo que provoca la
destrucción de la flora y la fauna autóctonas".
El glifosato es un contaminante pseudopersistente en suelos, como
se puede demostrar en el estudio realizado entre el CIM y el INTA, ello
significa que en el ambiente no ha logrado degradar la cantidad que ingresa, y
se acumula a razón de un miligramo por kilo por año.
Un estudio del CIM a nivel regional demostró que cuando llueve en
el centro de la ciudad de La Plata, cae glifosato y otros herbicidas, asociados
a la gota de lluvia. Esto se comprobó midiendo la concentración de este
compuesto en distintos eventos de lluvia en el caso urbano de la ciudad.
Los investigadores del CIM también comprobaron que el glifosato
está en la cuenca del río Paraná - Paraguay, tramo argentino, que es la más
importante del país, tanto como fuente de provisión de agua para consumo
humano, como asociada a distintas actividades productivas.
En esta cuenca, el herbicida está presente sobre todo en el tramo
medio inferior en la zona que va dese la provincia de Santa Fe hasta la ciudad
de Lujan en la provincia de Buenos Aires, que fue el último punto del
monitoreo.
Los expertos del CIM encontraron hasta 8 miligramos por kilo
(considerando el glifosato y su metabólito AMPA), en los sedimentos de fondo de
los distintos ríos y arroyos que desembocan en el Paraná, una concentración de
glifosato en el fondo de los ríos entre 2 y 4 veces superior al que se
encuentra en promedio en un suelo cultivado con soja.
Y explicaron: "al fondo del río el glifosato llega por dos
procesos: la escorrentía, cuando llueve todos los campos tienen pendientes que
van hacia los ríos o arroyos, y el otro es el atmosférico, la erosión eólica
sobre los suelos cultivados por lo que es altamente probable que los sedimentos
de los ríos de la región pampeana tengan glifosato".
El investigador contó que en una de las investigaciones realizadas
compararon entre las lagunas patagónicas y las lagunas de la provincia de
Buenos Aires y quedó demostrado que en las primeras no hay glifosato y en las
bonaerenses si, incluso en las lagunas de menor superficie se encontraba en
mayor concentración respecto de espejos de agua de gran extensión.
El CIM también demostró que el glifosato está en el algodón que
tenemos en el botiquín de una casa y en las gasas que se usan en los
hospitales. La vía alimentaria es otra forma de exposición al herbicida, al
consumir por ejemplo las verduras que provienen de campos trabajados con
barbecho químico.
DATO SALIENTE
Hace unos meses, el Concejo Deliberante de Gualeguaychú, en la
provincia de Entre Ríos, aprobó una ordenanza que prohíbe la comercialización y
el uso del herbicida glifosato en todo el ejido urbano. El investigador de la
Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP y del Conicet La Plata, Damián Marino,
fue uno de los oradores más convincentes en el debate que precedió la sanción
de la norma. El
científico realizó distintas investigaciones que demuestran el preocupante
nivel de contaminación que produce la aplicación indiscriminada del herbicida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario