Entrevista a Elio
Brailovsky
"No se puede
echar la culpa al cambio climático de lo que es la imprevisión de los
funcionarios"
2 de febrero de 2017
Por Mario Hernández (Rebelión)
M.H.: En el mes de diciembre el Ministro de
Medioambiente nos encomendó rezar ante el fenómeno natural, o sobrenatural que
afecta nuestro país, las inundaciones y los incendios. ¿Hay alguna explicación
más racional para todo esto?
E.B.: Aquí hay una
combinación de fenómenos naturales agravados por la irresponsabilidad humana e
institucional. En el caso de los incendios está claro, había sequía, el cambio
climático significa que en las zonas secas va a llover menos. Ahora, una vez
que esto viene anunciado y hay consenso en los científicos desde hace por lo
menos 20 años, no se puede echarle la culpa al cambio climático de lo que es la
imprevisión de los funcionarios.
Ya se sabe que va a haber sequías, ya se sabe que en las sequías
hay incendios, por lo tanto, hay que prepararse. Esto vale tanto para Argentina
como para Chile. En Chile es mucho más grave que para Argentina por dos
motivos, por un lado, porque ha habido un reemplazo del bosque nativo, que era
húmedo, por forestación seca que prende más fácil. Esta forestación llega hasta
el borde de los pueblos, con lo cual cuando se quemó la forestación se quemaron
los pueblos también.
Y en el caso de las inundaciones, ya se sabía que una cantidad de
zonas son inundables, ¿qué pasa entonces con los municipios que siguen autorizando
que se construya en zonas inundables?
M.H.: ¿Qué incidencia tiene el cultivo de la soja? Se
conoció durante estos días una información producida por ingenieros del INTA
que señalaban que ese cultivo generaba poca absorción de los suelos.
E.B.: Son varias cosas. Un
bosque en la medida que los árboles tienen grandes raíces, éstas canalizan y
envían el agua hacia el subsuelo y, al mismo tiempo, retienen agua en las hojas
y eso posibilita que baje más lentamente. Cuando hay un cultivo el agua va menos
al subsuelo con lo cual termina escurriendo en la superficie y de ahí a inundar
hay un paso muy chiquito.
M.H.: En nuestra última conversación abordamos el tema del
Riachuelo. Ahora hay una orden de la Corte Suprema para que en el término de 90 días
se produzca información al respecto por parte de la ACUMAR ( Autoridad de
Cuenca Matanza Riachuelo) . ¿Vamos a tener alguna precisión que no tuvimos en
la anterior audiencia de la
Corte Suprema con la ACUMAR?
E.B.: Es una especie de obra de teatro en la que los protagonistas
repiten las mismas palabras. En el año 2008 la Corte Suprema de
Justicia pidió una serie de informes que no le dieron ni en ese año, ni en los
siguientes. Entonces, la
Corte Suprema simula que está pidiendo por primera vez cosas
que ya pidió diez veces. En algún momento la sociedad tiene que decir basta.
Mientras repiten este juego en el que los funcionarios “se portan mal” la Corte
los “reta” y no pasa nada, y al año siguiente viene otro diciendo que es nuevo
y no sabe nada del tema, y la Corte lo vuelve a retar, y así sucesivamente.
Estamos en un círculo vicioso consciente, todos los actores de esto, excepto
las víctimas que son los vecinos, saben que están haciendo trampa.
M.H.: Un tema que tuvo bastante trascendencia fue el
informe de la ONG internacional Oxfam acerca de que el 1% más rico de la
población concentra en sus manos más riqueza que el resto del planeta, dieron
los nombres de los 8 más ricos, pero dentro de ese mismo informe hay otra cosa
que no tuvo tanta trascendencia, y es que se ha profundizado la concentración
de la tierra en la Argentina, apenas el 1% acapara el 33% del territorio. En
los últimos tiempos vivimos dos hechos que apuntan en este sentido, como lo
sucedido en El Bolsón en relación al empresario Joe Lewis y la situación vivida
en Chubut en relación a la comunidad mapuche del Lof en Resistencia de Cushamen
que reclama tierras que están en manos del empresario Benetton. ¿Cuál debería
ser a su entender el tratamiento de este tema?
E.B.: Creo que hay que
frenar esta estrategia de concentración de las tierras que están teniendo las
grandes empresas, una estrategia que tiene como herramienta el manejo del
mercado y el monopolio de la
tecnología. En la región pampeana, por ejemplo, y en todas
las zonas de grandes cultivos lo que han hecho es imponer este modelo sojero
que para poder trabajar allí hay que tener un campo grande, los que tienen
campos chicos tienen que alquilar la tierra a los monopolios o vendérsela a una
empresa grande. Con lo cual esta concentración de la tierra ha destruido la
cultura agraria, en los pueblos están quedando cada vez menos agricultores, hay
grandes latifundios y grandes empresas que son las que producen soja, trigo
soja, etc., en un campo cada vez más despoblado.
Entonces, hay concentración de la tierra, hay enriquecimiento de
unos pocos, hay una tecnología usada como arma económica que esta despoblando
el campo y obviamente la gente que no tiene trabajo en el campo termina
construyendo villas miseria en las ciudades.
M.H.: ¿Quiere agregar algo más?
E.B.: Simplemente recordar
que si no hay reclamos vecinales enérgicos por el Riachuelo no hay intenciones
de que avance nada.
Fuente:
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=222420
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