La alimentación en cuestión. Reflexiones de la Catedra Libre de
Soberania Alimentaria de la Facultad de Medicina/Nutrición de la UBA
27 de octubre de 2017
Por Licenciada Miryam K de Sorban*
En el último tiempo, el tema de
la problemática alimentaria del país y del mundo ha sido puesto en cuestión
desde distintas miradas respondiendo a distintos intereses políticos y
económicos.
Se suma en estos días,
la realización en Buenos Aires del 21° Congreso Internacional de Nutrición
(IUNS),auspiciado , financiado, y comprometido por las grandes empresas
productoras de alimentos altamente industrializados, responsables de la
epidemia de enfermedades crónicas no transmisibles que preocupa a las organizaciones,
que, como la OMS y la OPS elevan su voz de alerta a los organismos públicos, a
los gobiernos, a las sociedades científicas, y a la sociedad en su conjunto,
exigiendo del ESTADO QUE GARANTICE SU DERECHOS.
Congresos y reuniones
científicas que al defender los principios de la economía liberal de la máxima
ganancia, con la presencia de actores que tienen verdaderos conflictos de
interes, defienden los negocios pero no la salud, no la vida en su plenitud.
Al sumarnos a esta
Declaración nos corresponde hacer un breve repaso sobre la situación actual en
nuestro país referido a la situación alimentaria, que cuestionamos
enérgicamente.
Es así que aparecieron
controvertidas notas sobre el precio de los alimentos, por ejemplo, que en las
circunstancias inflacionarias actuales violan incuestionablemente el Derecho
Humano a la Alimentación al no garantizar el acceso físico y económico a
alimentos saludables a todxs, como se enuncia en el principio que figura en
nuestra Carta Magna, y en todos los compromisos internacionales que nuestro
país ha firmado.
Pareciera que el
señalar como causante del mismo a una economía concentrada y
transnacionalizada, cuyo actor clave es la industria alimentaria sujeta a la especulación
financiera, no merece la atención de los expertos en el área de la nutrición y
salud, ni de los “opinólogos”, que no reparan en que: Sin políticas públicas
que regulen a los formadores de precios, esta situación será difícil de
revertir.
La muerte de Rocío, la
niña que muriera “asesinada” por una mandarina envenenada con Furadán, veneno
prohibido en el país, destinada a matar a los pájaros que “amenazaban” a los
arándanos de exportación, constituye un verdadero ecocidio, dado que contaminamos
el suelo, matamos a los pájaros y asesinamos a una niña, pero protegimos el
cultivo de exportación. Este hecho no mereció más que un comentario
periodístico de pasada y por pocos días en todos los medios
de difusión. Garantizar la inocuidad de los alimentos como deber del ESTADO Y
GARANTÍA DEL DERECHO A LA ALIMENTACIÓN, lamentablemente no parecer ser uno de
los ejes a tener en cuenta.
La importación de
alimentos frescos que se producen en nuestra región, destruyendo las economías
regionales y la agricultura familiar pasa desapercibido y es fomentado desde el
propio Estado que debería ser su garante, creando una razón de dependencia en
un país productor de alimentos y violando los principios de la Seguridad y la Soberanía Alimentaria.
El control de la
seguridad y la inocuidad de los alimentos de consumo habitual que registraron
los informes del SENASA del año 2013, y se hicieron públicos por presión de los
movimientos sociales, muestran su alto grado de contaminación química, pero no
especifican si esos alimentos han sido decomisados o liberados al mercado,
violando así los principios básicos que los determinan para garantía de la
salud y la vida. Pensar
en que sucedió desde el año 2013 , al 2017 que desconocemos, no significa
violar el derecho a la información?
Por decreto además, se
habilita la irradiación de los alimentos de consumo habitual, comenzando ya con
las meriendas reforzadas de los escolares de los sectores vulnerables,
sándwiches de pan común, para que tengan mayor “duración” en una ciudad de
Entre Ríos, cuando tienen el pan fresco en la esquina de la escuela y puede ser
adquirido a diario. (Alimentos tratados con radiación. Clarín.com/Sociedad-
13/10/2017 citas del diario)
Si agregamos la
continuidad de las fumigaciones, los proyectos de ley de semillas llamadas “de
Monsanto”, la continuidad del uso de venenos ya señalados como cancerígenos por
el IARC,(Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer dependiente de
la OMS) la permanencia del monocultivo como modelo productivo de preferencia, la
estigmatización de los pequeños productores que son oriundos de la Patria Grande y
garantizan nuestra mesa, al modificar leyes que estimulan este tipo de
producción vigentes desde el 2003, las consecuencias de las catástrofes
climáticas que sufren provincias enteras de resultas de la misma situación, se
configura un cuadro de situación de gravedad.
A las alianzas y
fusiones monopólicas de quienes anteponen sus beneficios económicos, se
corresponde un llamado de alerta de todxs los que bregamos por la Salud y por
la Vida, para articular nuestro accionar en pos de asegurar para todxs el
Derecho a la
Soberanía Alimentaria , y recordar y tener presente una de las
resoluciones más importantes del Tribunal de La Haya de octubre de 2016 donde se afirma
la primacía de la legislación internacional de derechos humanos y ambientales
por sobre la legislación internacional de comercio e inversión que socavan la
capacidad de las naciones para mantener políticas, leyes y prácticas que
protejan esos derechos.
En la 34° sesión de
Naciones Unidas Hilal Elver Relatora del Derecho a la Alimentación señalaba: “ se ha aumentado la producción,
pero a costa de la salud humana y del medio ambiente…señala como responsables
al lobby empresario.. y además que se sale y se supera esta situación saliendo
de la
Agricultura Industrial …”
A todas estas
reflexiones que nos dan un somero estado de situación le contestamos con las
palabras de la Ciencia
Digna de “nuestro” Andrés Carrasco:
“Saben que no
pueden tapar el sol
con la mano. Hay
pruebas científicas y, sobre todo, hay centenares de pueblos que son la prueba
viva de la emergencia sanitaria”.
*Coordinadora de Calisa
Nutrición
No hay comentarios:
Publicar un comentario