China y América Latina
en el nuevo reordenamiento mundial
24 de noviembre de 2016
Por Crismar Lujano (CELAG/Telesur)
En la última década, China ha desempeñado un rol estratégico en el
crecimiento y progreso económico de América Latina y el Caribe. El desarrollo
de nuevas formas de relacionamiento, de objetivos comunes y búsquedas
compartidas, pero alejados de los viejos esquemas de dependencia, ha sido el
pilar fundacional de los vínculos de cooperación bilateral entre el gigante
asiático y la región. Es
por ello que la tercera gira latinoamericana de Xi Jinping, Presidente de la República Popular China ,
iniciada el pasado jueves 17 de noviembre en Ecuador, se presentó como una
oportuna ocasión tanto para destacar el compromiso con la región como para
fortalecer el desarrollo de estas relaciones, no sólo en términos cuantitativos
sino también cualitativos.
Relaciones Sur – Sur
China es el segundo mayor socio económico de América Latina. Esta posición de ventaja podría ser utilizada para condicionar las políticas económicas de los países de la región a cambio de apoyo financiero, tal y como lo hacen el grueso de los organismos internacionales de crédito. Sin embargo, la sintonía respecto a la gobernanza y el respeto mutuo sobre los asuntos internos de cada país, ha allanado en su lugar la construcción de un proceso abierto e inclusivo, sobre la base de un nuevo modelo de cooperación ganar-ganar.
En este sentido, no es de extrañar que el país asiático sea considerado como un puente hacia la transformación de la estructura de la matriz productiva de
Gira latinoamericana de Xi Jinping
En el marco de esta gira, Ecuador fue la primera parada oficial. Xi Jinping fue recibido por su par ecuatoriano, Rafael Correa, quien calificó la visita como “la más importante” de un jefe de Estado en la historia de su país. Lógico si se tiene en cuenta que ambos gobiernos comparten más de 200 instrumentos de cooperación e inversión bilateral, siendo Ecuador el tercer receptor de financiación por parte de Beijing, después de Brasil y Venezuela.
La segunda, o primera, economía mundial; según como se le mida, financia proyectos de beneficio mutuo que sólo en 2015 superaron los 4 mil millones de dólares de inversión directa en los sectores petrolero, minero, infraestructura y energía. Las inversiones en esta última área, han fomentado la creación de más de 14 mil empleos directos. Por su parte, la balanza comercial de Ecuador también ha rendido ganancias de esta relación: desde 2011 las exportaciones ecuatorianas al país asiático han ido in crescendo en promedio de 30% anual.
El encuentro China – Ecuador se selló con la firma de 11 acuerdos de cooperación, la entrega de 150 millones de dólares no reembolsables para construir 400 viviendas y dos hospitales en la zona devastada por el terremoto del pasado 16 de abril, y la inauguración de
La segunda escala de su visita a la región fue Perú. Luego de participar en
En Chile, tercera y última parada del periplo, el jefe de Estado chino suscribió 12 acuerdos y memorándums de entendimiento. Durante la ceremonia de la firma junto a
Si bien Venezuela no recibió la visita oficial del presidente chino, el país latinoamericano es actor clave de la agenda de cooperación China – América Latina. El mismo jueves iniciada la gira y mientras el presidente chino suscribía acuerdos en Ecuador, una delegación de la empresa china CNCP acordaba tras con la estatal venezolana PDVSA, un plan de inversión de 200 millones dólares para elevar la producción de petróleo conjunta a 227 mil barriles diarios extras en la faja petrolífera Hugo Chávez, así como la de otras empresas mixtas. De estos acuerdos, destaca la alianza para desarrollar el proyecto piloto de inyección alterna de vapor con lo cual se incrementará la producción de crudo extra pesado y la rehabilitación de 500 pozos de crudo liviano. Se trata pues, de una asociación sin otros objetivos que el de beneficio mutuo y ganancia compartida.
El compromiso chino con proyectos de gran alcance económico y social en América Latina es indicativo del avance de relaciones bilaterales cada vez más ambiciosas y transformadoras, y que llevadas de la mano con el desarrollo del tejido industrial de la región, serán capaces de generar cuantitativamente un mayor valor agregado y al mismo tiempo sustentar la integración cualitativa interregional. Si con la visita del presidente chino a Latinoamérica las relaciones bilaterales experimentan un nuevo impulso, la apuesta es entonces por la sincera diversificación y la superación de las asimetrías en el mismo grado de complementariedad.
(Este artículo ha sido realizado en
colaboración con Telesur).
Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=219570
No hay comentarios:
Publicar un comentario