Desde las Asambleas, colectivos y
organizaciones de los Pueblos Fumigados de la Argentina y de Latinoamérica
expresamos nuestra solidaridad con el compañero Médico Dr. Medardo Avila
Vazquez ante su despido arbitrario propiciado por un sistema de salud neoliberal
corporativo mercantilista y deshumanizado.
El despido se da en el contexto de la
pandemia del coronavirus y por haber ejercido su profesión con ética
profesional justamente en un caso concreto de un paciente, un niño de 2 años de
edad, en estado de salud muy delicado relacionado con la exposición a las
fumigaciones con agrotóxicos, algo de lo que Medardo sabe y mucho desde su
lugar de médico y se ha encargado de denunciar públicamente apenas se empezaron
a visibilizar los impactos del agronegocio.
Medardo como médico, como ser humano
y como militante a la par de los Pueblos Fumigados de la Argentina, siempre se
mostró generoso, solidario, cerca de las personas, cerca de los territorios,
cerca de las asambleas, palmo a palmo con quienes lo necesitaban y lo
necesitan. Sin pedir nada cambio, dignificando su condición de graduado de la Universidad Pública
y el compromiso con la sociedad.
¡Fuerza compañero! Estamos con vos!
¡BASTA de niñas y niños expuestos a
este modelo de muerte basado en trangénicos y agrotóxicos!
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