domingo, 26 de julio de 2015

I. Discutamos si la lógica electoral de la dirigencia e intelectualidad de las izquierdas revolucionarias es funcional al capitalismo. Porque limita el papel de estas últimas a vanguardizar la defensa popular frente al sistema. No pone en cuestión en cómo desarmar el poder del PJ ni dialogar abajo respecto a la crisis de representación existente y a la creciente acumulación oligopólica:

Entrevista a Eduardo Lucita de Economistas de Izquierda (EDI)
"Cuanta mayor representación institucional tenga la izquierda,
mejor va a ser para la resistencia a 
cualquier plan de ajuste que se venga".
15 de julio de 2015

Por Mario Hernández (Rebelión)

-M.H.: En comunicación con Eduardo Lucita. Te pido un primer balance de las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires. 
-E.L.: Las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires no arrojaron mayores sorpresas. Que el PRO iba a tener una excelente elección, que iba a volver a ganar en todas las comunas como ya lo viene haciendo, era perfectamente proyectable. La discusión que había era si iba a ganar en primera o en segunda vuelta, sabiendo que desde que existe el régimen de doble vuelta no hubo nunca un ganador en la primera. Sin embargo estuvo bastante cerca, aun sacando menos votos que Macri, la discusión ahora está en por qué razón lo que llaman “el círculo rojo” está intentando que Lousteau se baje de la segunda vuelta. 
-M.H.: Desde antes de que se conocieran los resultados ya estaba instalada esa campaña. 
-E.L.: Exactamente. Si de alguna manera llegara Lousteau en segunda vuelta a un 40%, aunque no ganara, evidentemente se instala como candidato con fuerza para dentro de los próximos 4 años, y creo que esa es su estrategia. Sin embargo, al mismo tiempo Rodríguez Larreta no ganaría tan fuerte como debería y eso se supone que debilitaría el proyecto de Macri a nivel nacional. 
-M.H.: Lousteau denunció presiones. 
-E.L.: Sí, lo han presionado para que se baje. Esa es una cuestión, la otra es que no ha sido una mala elección para la izquierda en general en la Ciudad de Buenos Aires, sumadas las fuerzas de izquierda tienen un 7/8%, han sumado legisladores y todavía faltan recontar 500 mesas que suman 100.000 votos, así que algún otro candidato del FIT al que todavía le faltan unas décimas está arañando una posibilidad. 
-M.H.: También fue muy buena la elección del FIT en Córdoba. 
-L.: Sí, el 6% de los votos y 3 diputados provinciales. Es un proceso interesante, incluso impulsa la candidatura de Liliana Olivera en las próximas elecciones a diputada nacional, aunque creo que para salir tiene que conseguir un 9%. 
-M.H.: La elección anterior no entró por fraude. 
-E.L.: Le robaron la diputación. El FIT está haciendo una buena performance en todos los lugares en los que se ha presentado. En Santa Fe se pensaba que no pasaba las PASO y no solo lo hizo sino que además en las definitivas aumentó el caudal de votos. 
-M.H.: Otro tema que se ha instalado es lo que podríamos titular “Ganó el PRO, pero perdió el cambio”. ¿Cómo ves eso? 
-E.L.: Hasta ahora los oficialismos van ganando en casi todos lados, excepto en Mendoza, donde el candidato oficialista del peronismo perdió pero sacó el 40% de los votos. Lo que hay es una recomposición del Partido Justicialista, porque si tomás lo de Mendoza, lo de Santa Fe con Perotti que ha hecho una muy buena elección y el comportamiento que está habiendo en la provincia de Buenos Aires notás una fuerte recomposición del PJ. Ese es el dato que esta surgiendo de estas elecciones. 
-M.H.: El kirchnerismo, al que no le fue tan bien este fin de semana, se cubrió detrás del triunfo de Syriza. Me dio esa sensación, porque la Presidenta habló del tema y también lo hizo Recalde. ¿A qué lo atribuís? 
-E.L.: Creo que si hay un gobierno que ha tenido posición internacional en relación al tema de la deuda ha sido el argentino, lo ha llevado a las Naciones Unidas y a cuanto foro ha podido, incluso antes de la avanzada de los Fondos Buitre. El Gobierno argentino quiere imponer reglas para el endeudamiento, no eliminar el endeudamiento, en ese sentido el sistema de recurrir a lo que llaman mercado voluntario de crédito es defendido por el gobierno, lo que señalan es que hay que poner ciertas reglas para que no aparezcan los buitres. En ese sentido la crisis de la deuda en Grecia le viene muy bien, pero no alcanza para ocultar que la performance del kirchnerismo en la Ciudad de Buenos Aires no ha sido para nada buena, no ha alcanzado la votación de Filmus unos años atrás. Está claro que el peronismo en la Ciudad de Buenos Aires tiene un piso del 20% y un techo del 25%, de ahí no pasa.  
El no (oxi) del pueblo griego a la Troika fue contundente  
-M.H.: Volviendo al tema de Grecia, se habló hasta horas antes del comicio de una suerte de empate técnico, y después resultó que el No a la Troika y a su ajuste fue contundente. 
-E.L.: Creo que quedó claro que los grandes medios de información europeos estaban todos en contra del referéndum, inclusive los líderes de la Unión Europea habían planteado que los temas de la deuda se trataban de problemas técnicos económicos que no se resuelven con el voto popular, en realidad estaban diciendo que la democracia tiene sus límites y los pone el interés del capital.
El gobierno de Grecia respondió con el referéndum, puso el tema de la deuda en un nivel político muy alto ligado a la soberanía popular y ha sido un hecho muy importante. Creo que en esa disputa los grandes medios querían imponer el miedo por un lado y, por otro, el empate técnico diciendo que Tsipras iba a perder.
Si sumamos desde las últimas elecciones en enero, donde ganó Syriza, más los votos de la fracción nacionalista que es aliada del gobierno, más los de los fascistas de Amanecer Dorado, te da un 47%, quiere decir que la diferencia entre 47 y 61% son todos votantes de partidos del ajuste, es decir, que hay un traslado de los votos de los sectores de derecha o de la socialdemocracia, que tiene miedo a salir del Euro pero que, sin embargo, votaron a Syriza.
En realidad lo que se planteó como un referéndum por sí o no al ajuste, ha sido un plebiscito hacia el gobierno de Tsipras, que sale muy fortalecido para abrir una negociación. Además ha ayudado a resquebrajar el frente de los acreedores en la Unión Europea, porque el memorándum de último momento del FMI cambiando toda la estrategia dejó mirando para otro lado al Banco Central Europeo y a la Comunidad Económica Europea, ese frente se ha roto, también hay una ruptura entre Francia y Alemania que no encuentran puntos de acuerdo y ya hay muchos gobiernos de la Unión Europea que están planteándose que si siguen con las políticas de ajuste que impulsa Alemania, la crisis no tiene salida, que si eso sigue así está claro que irán creciendo las tensiones en el interior de Syriza y de los sectores de la izquierda anticapitalista que están fuera de Syriza que también ven que no hay otra salida que no sea suspender los pagos y salir del Euro.
La situación es indeterminada, cambia por horas, hoy obligaron a renunciar al Ministro de Economía de Grecia, que estaba a la izquierda y que según dicen fue el mentor del referéndum. 
-M.H.: La semana pasada escribiste un artículo sobre la oficialización de las presidenciales, me quiero centrar en un tema, porque allí hablás de “intercambio de figuritas” ¿Qué quisiste significar con esa frase?  
La selección de candidatos presidenciales es una verdadera feria de vanidades  
-E.L.: Creo que en la selección de candidatos, en todas las fórmulas, con excepción del Frente de Izquierda, lo que hubo es una ausencia de política por completo. Son figuras que tienen que ver con lo mediático, que expresan intereses empresariales, que están vinculados a distintas formas de comunicación, artistas, ex deportistas, familiares, porque hay que mirar las listas completas no solo los primeros nombres. Es una verdadera feria de las vanidades, ese cambio de figuritas es porque son muchos los que estaban en un frente y se bajaron de un día para el otro, están los que eran candidatos luego se bajaron y luego se volvieron a postular. Es realmente una situación donde la política está ausente, los intereses que se expresan son de otra índole y porque además están subordinados a las encuestas. 
-M.H.: Que en general no aciertan demasiado. 
E.L.: Pero los partidos se guían por las encuestas, donde la mayoría de los dirigentes no han atravesado ninguna etapa histórica, no tienen una trayectoria consecuente en el tiempo. La militancia no es una condición para ser candidato, lo que pasa es que los elegidos no contraen ningún compromiso con los electores y son muy permeables a los poderes económicos. Cuando mandan las encuestas la política está subordinada y se va degradando. Eso ha pasado aquí y en otros países y es claro que es una estrategia del capital.
Una cosa es tener personajes como Macri, que es un hombre directamente de la formación del capital, es uno más de los empresarios, y otra es tener burócratas políticos que pueden expresar los intereses del gran capital pero que de todas maneras están condicionados por los electores, tienen que responder a ellos, etc. Pueden expresar los mismos intereses, pero su comportamiento muchas veces es diferente por su naturaleza social, creo que eso es lo que ha estado en danza durante todo este tiempo. Que los principales candidatos hayan ido al programa de Marcelo Tinelli ha hecho que más que salir fortalecidos, todos ellos, como decía un chiste, le dieron el apoyo para que ocupe un puesto en la Asociación de Fútbol (AFA). 
-M.H.: ¿Querés agregar algo más? 
-E.L.: Se abren nuevas perspectivas tanto a nivel nacional como internacional, según como se resuelva el tema de Grecia, la vieja Grecia que peleó por su independencia, que fue cuna de la democracia, que resistió a la invasión de los nazis está a punto de escribir una nueva página de honor en la historia. Por otro lado, acá en Argentina estamos marchando a un nuevo proceso electoral, dentro de la pobreza general, la izquierda esta acumulando un pequeño núcleo, ha roto la marginalidad, parece que la polarización que amenazaba con cerrarle muchos espacios no es tanta, parecen estar abriéndose al menos para cargos intermedios y ese es un hecho que veo como muy positivo y que hay que estimular.

El tiempo que se viene no va a ser fácil, por la crisis mundial y por los temas locales, entonces cuanta mayor representación institucional tenga la izquierda, mejor va a ser para la resistencia a cualquier plan de ajuste que se venga. Esa consigna “Un pie en las instituciones y miles en las calles”, que acá tengamos la mayor cantidad de representantes en las instituciones y podamos dinamizar en las calles, es buena para la gente en general. Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=201131

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