“Estamos buscando que caigan los dueños para que se asiente jurisprudencia y todas las denuncias pendientes que hay sobre la responsabilidad de las marcas tengan un punto de partida para condenarlas”.

A 10 años del incendio del taller clandestino 

de Luis Viale

30 de abril de 2016

 

En Luis Viale vivían 67 personas en un galpón de 12 x70 mts, reducidas a la servidumbre. Luego del incendio donde murieron 5 niños y una mujer embarazada, el 18 de abril comenzó el juicio oral que se lleva a cabo en el Tribunal Oral Nº 5 de la Ciudad de Buenos Aires. 

Por Mario Hernández 

Mario Hernandez: Se sigue hablando de la “tragedia” del taller textil de la calle Luis Viale cuando en realidad fue una masacre donde murieron 5 niños y una mujer embarazada. Estamos en comunicación con Jerónimo. Ayer (18.4) fue el primer día del juicio y vos estuviste allí.

Jerónimo: Después de diez años, ayer fue el primer día del juicio que se lleva a cabo en el Tribunal Oral Nº 5 de la Ciudad de Buenos Aires en Talcahuano 550. Luego de todas las formalidades del caso, declararon uno de los dos imputados y tres testigos. Haciendo un breve resumen, el imputado que habló que es uno de los dos capataces del taller y ninguno de los dueños de la marca está afectado. Nosotros como querella estamos buscando que caigan los dueños para que se asiente jurisprudencia y todas las denuncias pendientes que hay sobre la responsabilidad de las marcas tengan un punto de partida para condenarlas.

En cuanto a las declaraciones en sí, el imputado declaró algo que lo complica más, porque dijo que él sabe de electricidad y que sin estar matriculado había hecho una ampliación de las instalaciones. Habló también un vecino que dijo que escuchaba las máquinas a cualquier hora y que recordaba haber ido un sábado a la 1am. a golpear la puerta porque estaban sonando las máquinas. Lo más importante que declaró este vecino es que solía verlo al dueño de la marca, que era el dueño de la propiedad donde se desarrollaba el taller. Evidentemente él era el jefe.

M.H.: ¿Cómo se llama ese señor?

J.: Daniel Fischberg, quien junto a Javier Geiler son los dueños de las tres marcas para las que producía este taller: Wol, JD y LDV. No son marcas conocidas, de hecho Wol está dada de baja, pero ellos siguen con el negocio. No están ni siquiera imputados y siguen participando en los negocios. De hecho pasé el otro día por el taller que tienen actualmente que queda a la vuelta del que se incendió y ahí estaba el dueño llevando cortes.

M.H.: ¿Cuál es el mecanismo?

J.: Es un mecanismo común en el sector, cuando llegan a un determinado nivel de producción y necesitan ampliarse, en vez de irse a una fábrica más grande en las condiciones que corresponde, tomando más trabajadores y generando puestos de trabajo, lo que hacen es ponerle un taller a un empleado. Le dan el espacio y las máquinas, porque las máquinas las pusieron los dueños de la marca, y lo hacen trabajar para ellos. Trabajan uno o dos años, de ese trabajo descuentan la inversión y después les queda el taller. Esa es la propuesta que hacen, así se reproducen los talleres informales chicos con producciones grandes y las marcas quedan desligadas de responsabilidad. 
Por lo tanto, si en este juicio donde la responsabilidad de la marca es absolutamente visible, quedan libres, se estaría asentando jurisprudencia para el otro lado.

M.H.: Te quiero contar que soy profesor de segundo año en un Bachillerato Popular en la Villa 21-24 del barrio de Barracas, y ayer hicimos un trabajo donde leímos el comunicado del Colectivo de militantes por los derechos de los y las costureras y costureros. En segundo año, en la materia economía popular, dividimos una parte teórica que doy yo, una parte proyectual y lo que tiene que ver específicamente con taller. Justamente ayer estuvo la compañera que coordina la parte de taller, es una trabajadora del polo textil del Frente Darío Santillán, y la otra compañera, que da la parte proyectual señalaba que casi toda la producción textil, no solo la que se realiza en Argentina, sino en el mundo, se hace bajo estas condiciones, salvo excepciones. Una de las excepciones estaba presente allí representada por la compañera del FPDS, trabajadora del polo textil, que explicó las condiciones en las que ellxs trabajan y cómo contrastan con lo que habíamos leído del comunicado. ¿Esto es así?

J.: La realidad de este tipo de talleres clandestinos, a los que yo llamo “talleres locales” de producción de indumentaria, a diferencia de los internacionales, que hay en muchos lugares, incluso en Europa. 
Yo hice un trabajo de campo como geógrafo que soy, en Prato, Italia, donde hay alrededor de 3.500 talleres clandestinos que trabajan para Gucci, Dolce & Gabanna, Channel y marcas por el estilo. Que importan las carteras a medio hacer y terminan de hacerlas en talleres clandestinos donde trabajan sobre todo emigrantes chinos, en talleres manejados por empresarios chinos también, pero bajo estrictas indicaciones de empresarios italianos.

Eso se da en el corazón de Italia, a 20 minutos de Florencia. Fue denunciado un caso similar en Leicester, Inglaterra, también en Manchester en 2009, son condiciones que se dan en muchos lugares del mundo.

M.H.: Como vemos no solamente en el Tercer Mundo. También recuerdo el caso de Sri Lanka donde se incendió una fábrica.

J.: En Bangladesh. Hubo 4 incendios entre 2011 y 2012 y en uno murieron más de 1.100 trabajadores. A partir de eso parece haber habido en el ámbito de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), aceptación por parte de los empresarios para discutir normas de seguridad en esas fábricas. Pero hay diferencias, porque las fábricas del Sudeste Asiático producen en masa, donde los trabajadores trabajan diez horas, pero a la noche se van a dormir a su casa. En Luis Viale vivían 67 personas en un galpón de 12 x70 mts. La familia de uno de los talleristas vivía en un entrepiso que era de un machimbre de menos de una pulgada de espesor. Condiciones de vida y de trabajo de reducción a la servidumbre.

M.H.: ¿Frente a todo esto qué hace el Gobierno de la Ciudad?

J.: Básicamente desmanteló las inspecciones de trabajo. El 27 de abril del año pasado se incendió otro taller, donde murieron Rolando y Rodrigo Mur, dejando en claro que no había cambiado nada. Se va a cumplir un año en unos días.

M.H.: También trabajamos el caso en el Bachillerato el año pasado.

J.: Es una realidad que en Barracas los toca cada vez más. Con la llegada de la electricidad a la Villa 21-24 y Zabaleta se están expandiendo los talleres. Esto provoca una bajada de tensión a todo el barrio porque son instalaciones precarias.

M.H.: Me das un dato interesante porque uno de los temas en los que más insisto es que armemos una cooperativa textil como extensión del Bachillerato a la comunidad. Si lo concretamos vamos a chocar con esta nueva realidad.

J.: Además, la realidad de las cooperativas está complicada, lo importante es tener en cuenta que uno se pone a producir en este sector en el marco de una competencia desleal, ruinosa, con todo un ejército industrial de reserva, “dispuesto” a trabajar en terribles condiciones. Digo “dispuestos” porque en realidad no conocen sus derechos, se trata de inmigrantes que muchas veces no los conocen. Se suele decir que eligen trabajar así. Es una discusión grande que tenemos al interior del juicio inclusive.

Yo dudo que la decisión sea tomada libremente, porque cuando uno no conoce sus derechos no puede tomar ninguna decisión libremente. Cuando uno tiene un tallerista diciéndole que tiene que trabajar más duro, pagándole a destajo, no se puede considerar que esté tomando la decisión de trabajar 12 horas por día libremente. Desde Marx que sabemos que eso no es así. Es un lugar muy difícil para organizar cooperativas que puedan establecerse en el mediano plazo. 
Es importante hacerse un lugarcito con algunos emprendimientos de marcas pequeñas que están buscando producir como corresponde, que son pocas, pero existen. También tener en cuenta que hace falta escala, organizar bien una producción para poder ofrecer una tarifa que le sirva a la marca y a los trabajadores.

En el blog http://juicioluisviale.wordpress.com, hay una sección que se llama “el diario del juicio” donde pueden seguir lo que va sucediendo.

Fuente: http://www.anred.org/spip.php?article11917