En
el Vaticano
El papa Francisco habló de
la deuda ante la titular del FMI: “No se puede pretender que se pague con
sacrificios insoportables”
El sumo pontífice expuso en el seminario convocado por la Academia de
Ciencias Sociales del Vaticano, del que también participa el ministro de
Economía, Martín Guzmán.
Julio
Algañaraz
Corresponsal en Roma
El Vaticano,
Corresponsal
El Papa dio este miércoles un
decisivo respaldo a las negociaciones que lleva la Argentina
para reestructurar su enorme deuda externa, al pedir en un seminario en el
Vaticano “modalidades de reducción, dilación o extinción de la deuda”. “No se
puede pretender que las deudas contraídas sean pagadas con sacrificios
insoportables”, afirmó.
En el aula principal de la Pontificia Academia
de las Ciencias Sociales, el pontífice tenía a su lado en el estrado mientras
hablaba a la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina
Georgieva, que asentía continuamente a los conceptos de Francisco.
El ministro de Economía argentino, Martín Guzmán, sentado
junto a Georgieva, también asentía y aplaudió con entusiasmo cuando el
pontífice concluyó su discurso. Junto a él estaba sentado, y sonreía, el
economista norteamericano Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, que dirigió
una parte de los debates.
La directora del FMI y Guzmán cenaron
juntos el martes por la noche en la embajada argentina en Italia y debatieron
durante dos horas la situación argentina, Georgieva dijo que los resultados de
la discusión habían sido “muy constructivos”.
Considerada por el Papa “una amiga” por
sus posiciones de gran sensibilidad social, contra la tradicional indiferencia
en la materia de sus antecesores en el FMI, Georgieva dijo que “hay que
solucionar los problemas de la deuda de los países pero sin perder de vista a
los más vulnerables”.
Mientras el Papa hablaba, sus gestos de
apoyo a lo que Francisco decía representaban también de su parte un espaldarazo
a la búsqueda argentina de un acuerdo que tenga en cuenta la grave situación
del país.
Jorge Bergoglio, que lucía en buena forma física, citó
varias veces a su antecesor, el Papa polaco Juan Pablo II, quien afirmó que
“las deudas deben ser pagadas” pero que “no es lícito exigir o pretender su
pago cuando este vendría a imponer de hecho opciones políticas tales que
llevaran el hambre y la desesperación a poblaciones enteras”.
Francisco destacó que “las personas
empobrecidas en países muy endeudados soportan carga impositivas abrumadoras y
recortes de los servicios sociales, mientras sus gobiernos pagan deudas
contraídas que son insostenibles”.
Según el Papa argentino los organismos
multilaterales de crédito que asesoran a las naciones (el principal es
precisamente el Fondo Monetario Internacional) “deberían tener en cuenta conceptos
como la justicia fiscal, los presupuestos públicos responsables de su
endeudamiento y, sobre todo, la promoción efectiva y protagónica de los más
pobres en el entramado social”.
Jorge Bergoglio citó varias estadísticas para demostrar
que ”el mundo es rico” pero en manos de minorías que se quedan con gran parte
de las riquezas. Recordó que “según informes oficiales este año el ingreso
mundial será de 12 mil dólares per capita”. “Sin embargo, cientos de millones
de personas siguen sumidas en la pobreza extrema”.
“No hay una ley mágica o invisible que
nos condene al congelamiento o a la parálisis frente a la injusticia”, agregó
el Papa frente a una audiencia de líderes mundiales que incluyó ministros de
Economía y cancilleres de unos veinte países, presidentes de organismos y
bancos públicos internacionales.
Al final todos se sacaron una
fotografía de recuerdo con el Papa en el patio de la bella Casina de Pío
IV, el bello palacio del Renacimiento que el pontífice de ese nombre hizo
construir en 1506.
Francisco dijo en otro pasaje que “la
subsistencia y el progreso son derechos fundamental de los pueblos” que no
pueden ser arruinados por deudas insostenibles .
Reclamó que por unanimidad los países
de las Naciones Unidas aprobaron por unanimidad los objetivos del desarrollo
sostenible, que se obtienen “a través de políticas coordinadas destinadas a
fomentar la financiación de la del deuda, el alivio de la deuda y la
restructuración de la deuda”.
Después que Jorge
Bergoglio abandonó
la Casina de Pio IV para viajar 400 metros hasta la Casa de Santa Marta, el
hotel interno vaticano donde se aloja (allí pernocta también el ministro de
EconomíaMartín Guzmán),
se realizó el último debate, en el que la directora del FMI, disertó sobre
“nuevas reglas y prioridades para la finanza global. Por su parte, Martín
Guzmán, participó del debate sobre la transformación de las reglas de la
arquitectura financiera internacional.
Fuente: https://www.clarin.com/politica/papa-francisco-hablo-deuda-titular-fmi-puede-pretender-pague-sacrificios-insoportables-_0_s_axLOeQ.html
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