Las alarmas de Nilda Garré
10 de septiembre de 2014
En una extensa nota publicada en su cuenta oficial de
Facebook titulada “suenan alarmas de xenofobia”, la ex Ministra de
Seguridad y actual embajadora ante la OEA Nilda Garré
salió al cruce de las declaraciones de Sergio Berni de la semana pasada. El
Secretario de Seguridad había dicho que era necesario modificar la política
migratoria de la Argentina para poder expulsar a los inmigrantes que “vengan a
la Argentina a delinquir”.
Garré
estuvo a la cabeza de un ministerio que nació después de las tomas de tierra
del Parque Indoamericano, donde una mayoría de inmigrantes bolivianos y
paraguayos fueron los que pusieron el cuerpo (y los dos muertos) a la represión
conjunta de las policías Metropolitana y Federal. No hace falta ser un
memorioso para recordar también la conferencia de prensa donde Aníbal Fernández
directamente amenazó a los que ocuparan un terreno (un fenómeno que se extendía
con virulencia no sólo en la
Capital Federal sino también en el Gran Buenos Aires, Tucumán
y Jujuy) con que iban a quitarle los subsidios como la Asignación Universal
por Hijo.
La
respuesta al reclamo legítimo de un techo en el que vivir fue respondida desde
el Estado con la llana extorsión y la conformación de un Ministerio que digitó
verdaderos planes de ocupación de las villas y barriadas humildes por parte de
la Gendarmería y la Prefectura (los respectivos operativos “Centinela” y
“Cinturón Sur”). Esta estrategia que Garré protagonizó fue acompañada de la
apuesta a la estrategia de la llamada “política de seguridad democrática” que
pregonada por el CELS de Horacio Verbitsky y el arco izquierdo del
kirchnerismo.
Discurso
progresista, prácticas pre democráticas: la promesa de desarticulación del
juego propio de las fuerzas de seguridad avanzó en la desvinculación de algunas
cúpulas policiales pero lo que se planteó como una reafirmación de la política
de no represión de la protesta social naufragó junto con la carrera política de
Nilda Garre. Las denuncias impulsadas por el PTS y organismos de Derechos
Humanos por el Proyecto X, un plan sistemático de averiguación de datos
personales de manifestantes organizado desde Campo de Mayo, comprobaron a los
ojos de millones no sólo la incapacidad del progresismo para mostrar una fuerza
renovada, también que ese mismo progresismo se valía de métodos de la dictadura
militar para perseguir a la protesta social.
Aunque no
nombra al Secretario de Seguridad a lo largo de su nota, el escrito de Garré
debe comprenderse como parte de la interna abierta dentro del kirchnerismo
alrededor de los recientes escándalos protagonizados por la Gendarmería Nacional. Un
Torales “carancho” saltando sobre el auto de un manifestante para simular que
lo atropellan, un “hombre canoso de barba” que camina entre los manifestantes
de la autopartista
Lear y resulta ser el comando carapintada Roberto Angel
Galeano, el encargado del operativo represivo, que había sido “depurado” y que
Berni volvió a llamar a servicio.
La
“parábola completa” que señalara Verbitsky alrededor del traspaso del control
ciudadano al control militar de las fuerzas de seguridad se da en el marco de
estas postales que rozan la
decadencia. La ex ministra puede escandalizarse porque suenan
alarmas de xenofobia, pero en verdad esta y otras alarmas hace años que a
muchos vienen aturdiendo.
http://www.laizquierdadiario.com/Las-alarmas-de-Nilda-Garre
No hay comentarios:
Publicar un comentario