Millones de jóvenes se
movilizan en todo
el planeta por la
justicia climática
11 de noviembre de 2019
Por Enric Llopis (Rebelión)
En la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático, de 2018, celebrada en Katowice (Polonia), la joven activista afirmó: “Países ricos como Suecia han de empezar a reducir las emisiones al menos un 15% anual, para alcanzar el objetivo del calentamiento global por debajo de los
La huelga mundial por el clima del pasado 15 de marzo movilizó, según fuentes de la organización, al menos a 1,4 millones de jóvenes en 2.418 ciudades de todo el planeta. Tom Kucharz, miembro de Ecologistas en Acción, ha participado en un acto sobre “Crisis climática como consecuencia de la depredación capitalista”, organizado por el Centre de Documentació i Solidaritat amb Amèrica Llatina i Àfrica (CEDSALA)-País Valencià. “Más allá de las manifestaciones –subraya el activista-, están produciéndose acciones de desobediencia civil masiva para forzar a los líderes políticos a la toma de decisiones; es muy importante conectar la justicia climática con la agenda socialy la lucha en los barrios”, añade.
Los
inicios del movimiento Extinction Rebellion (XR) remiten al 31 de octubre de
2018, cuando 1.500 personas participaron en una acción de bloqueo en Parliament
Square de Londres, y formularon una “Declaración de Rebelión” contra el
gobierno británico por su inacción “criminal” ante la crisis ecológica;
“nuestros mares están envenenados y aumenta la acidificación. Las
inundaciones y la desertificación harán inhabitables vastas extensiones de
tierra, lo que causará migraciones masivas”, alertaron.
El 15 de abril de 2019 grupos
Extinction Rebellion desarrollaron acciones de protesta en 80 ciudades de 33 países.
En Londres bloquearon cinco puntos neurálgicos de la ciudad, en los que se
organizaron asambleas, actividades artísticas y denunciaron, en la sede de
Shell, el “ecocidio” perpetrado por la petrolera (fueron escenario de las
reivindicaciones, asimismo, las oficinas de Repsol en Madrid, de Asimismo respaldan a By 2020 We Rise Up cerca de 50 organizaciones, la mayoría europeas. La Plataforma-Campaña independiente By 2020 tiene como fin contribuir a una conexión entre las luchas (no planificarlas) por la justicia climática y el cambio de sistema. “Durante los últimos días de septiembre de 2019 y en 2020, Europa vivirá varias oleadas de acciones masivas coordinadas: la gente bloqueará gasoductos, puertos, aeropuertos, minas de carbón, la agroindustria, bancos, fábricas de armas y fronteras”, señalan en
En este contexto, By 2020 se define como punto de contacto, difusión de acciones y “esfuerzo de coordinación” que no habla en nombre de los grupos locales ni activistas; la Campaña/Plataforma cuenta con un equipo de difusión, traducción, trabajo legal, además de los encargados de
“¡Paremos el carbón, que todas las aldeas permanezcan!”. Es la consigna con la que el movimiento internacional Ende Gelände convocó -entre el 19 y el 24 de junio de 2019- a la acción directa no violenta en el área de la minería de lignito de Renania; así, más de 6.000 personas bloquearon puntos estratégicos en las zonas que explota la compañía energética alemana RWE; ocuparon vías férreas para el suministro de combustible a la central eléctrica de Neurath, propiedad de RWE; entraron en la mina a cielo abierto de Garzweiler, cerca de Colonia, y pararon excavadoras de carbón, mientras 8.000 personas convocadas por ONG y colectivos locales se manifestaron en apoyo de las poblaciones amenazadas por la minería; asimismo el 21 de junio, 40.000 jóvenesmarcharon en la ciudad de Aquisgrán (Renania del Norte-Westfalia), a
Entre el 25 y el 29 de octubre de 2018, Ende Gelände convocó a los bloqueos en la mina carbonífera cercana al bosque de Hambach, en Renania; contra las talas forestales y extracción de lignito por
En el acto de CEDSALA, Tom Kucharz también ha destacado la lucha de los jóvenes de Sunrise en Estados Unidos, movimiento surgido en 2017. En las redes sociales se presentan con la siguiente disyuntiva: “Nuestro gobierno ha de elegir: proteger los bolsillos de los ejecutivos del petróleo y sus bonos de millones de dólares” o, por otro lado, “nuestro futuro”. Entre los principios de Sunrise figura la no violencia “que nos permite ganar el corazón de la gente”. Se organizan en nodos, radicados en pueblos, ciudades y escuelas de Alaska, California, Florida, Washington o Nueva York. El movimiento respalda a políticos y candidatos que representen a los ciudadanos y no a la industria de los combustibles fósiles, pero –matizan- “no hay amigos ni enemigos permanentes”. Entre los apoyos recibidos por los activistas, destaca el de
Una
de las propuestas centrales y con la que interpelan a la política oficial es el
New Deal verde; el nuevo acuerdo verde
apunta, con la perspectiva de una década, a la “movilización” de la sociedad
estadounidense hacia los objetivos del 100% de energías limpias y las emisión cero de gases de efecto invernadero;
también a “crear millones de buenos empleos con salarios altos y
garantizar la prosperidad y seguridad económica de toda la población de Estados
Unidos”. El 10 de diciembre de 2018 mil activistas de Sunrise reivindicaron el
New Deal verde en el Congreso (Washington), donde protagonizaron sentadas en las oficinas de dirigentes del
Partido Demócrata y mostraron carteles con las consignas “No más excusas” o
“Haced vuestro trabajo”; 143 personas fueron arrestadas. Además la policía
practicó más de 40 detenciones cuando, en febrero, estudiantes de Kentucky
protestaron en las oficinas del senador Mitch McConnell, del Partido
Republicano, en el Capitolio; con el lema “Míranos a los ojos”, los estudiantes
y los miembros de Sunrise preguntaron si las donaciones que McConnell recibió
-en las tres últimas legislaturas- de las compañías del petróleo, gas y carbón
(1.542 millones de dólares) eran más importantes que el futuro de la juventud.
Tom Kucharz ha participado en
otro debate en Valencia, en el Centre La Nau de la Universitat, sobre Transnacionales,
Derechos Humanos y Tribunales de Arbitraje. El investigador social y activista
ha destacado, como uno de los ejes de lucha para los movimientos sociales, el
acuerdo de libre comercio entre Integrada por un centenar de organizaciones,
Otro punto neurálgico y de batalla, según Kuchard, es el Tratado sobre la Carta de la Energía (TEC), acuerdo comercial y de inversiones que entró en vigor en abril de 1998, y del que son miembros cerca de 50 países, principalmente europeos pero también de Asia. “El tratado permite que los inversores extranjeros puedan demandar a los gobiernos signatarios por cualquier medida adoptada en el sector de la energía que consideren perjudicial para sus ganancias”, resume el informe Un Tratado para gobernarlos a todos, publicado en 2018 por Corporate Europe Observatory (CEO) y el Transnational Institute (TNI); las demandas no se resuelven ante los tribunales ordinarios, sino ante tribunales internacionales de arbitraje entre inversores y estados.
El documento señala que, entre 1998 y mediados de 2018, se habían producido al menos 114 demandas de inversores y multinacionales en virtud del TCE; y que, a finales de 2017, los gobiernos habían sido condenados/accedido a pagar 51.200 millones de dólares en concepto de daños. “El TCE es uno de los obstáculos más importantes para adoptar iniciativas contra el cambio climático por parte de los gobiernos”, concluye
El documento de CEO y el TNI cita ejemplos como el de la multinacional sueca Vattenfall, que presentó en 2012 una demanda contra el gobierno alemán (4.300 millones de euros más intereses) en concepto de indemnización, cuando el ejecutivo decidió el abandono paulatino de la energía nuclear (la compañía se basó en la pérdida de ganancias vinculada a dos de sus reactores nucleares); el informe añade que, en 2017, la empresa británica Rockhopper demandó al Estado de Italia, por la negativa a otorgarle una concesión para las perforaciones de gas y petrolíferas en un yacimiento del Mar Adriático (las reclamaciones se basan en gastos irrecuperables y expectativas de ganancias de la petrolera). Por otra parte, en una carta dirigida a la ministra para
Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=262299
No hay comentarios:
Publicar un comentario